En la época estival si no se quiere paralizar la actividad, existe la necesidad de sustituir a los trabajadores que disfrutan de sus Vacaciones, vamos a ver distintas formas de afrontar dicho problema:
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Se puede pensar que el contrato de interinidad es el más adecuado, pero no es lo correcto porque durante el descanso vacacional no se suspende la relación laboral.
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Lo mejor es hacer un contrato eventual por circunstancias de la producción, porque la ausencia de trabajadores por el periodo vacacional justifica el uso del contrato eventual por acumulación de tarea. En el contrato se debe hacer constar expresamente:
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La causa de la contratación.
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El nombre y apellidos del trabajador a sustituir.
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La duración del periodo o periodos a sustituir.
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En segundo lugar la propia plantilla puede sustituir las vacaciones del resto de sus compañeros:
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o Si hay trabajadores a tiempo parcial, se pueden pactar horas complementarias, aumentando hasta un 30% la jornada para la que ha sido contratado.
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o Si los trabajadores están a tiempo completo podrían acordar una distribución irregular de jornada, que podría llegar al 10% de las horas anuales.
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